Hagoromo (El Manto de Plumas)

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                H  A  G   O  R  O  M  O (El Manto de Plumas)

      por Motokiyo Seami

Personajes:

Angel

Hakuryo, pescador Segundo pescador

Tercer  pescador

Coro

Coro:

Sobre las ondas de la bahía de  Mijo

Hacia el  mar abierto,

Claman en el viento célere

Los gritos de los remadores.

Hakuryo:

Soy el xjeaooúor Hakuryo

Mi caas queda en los pinares de Mi jo.

Hakuryo y los otros dos pescadores:

Sobre diez mil leguas de montañas.

Amplios paños de nubes

De pronto se entreabren.

Cesa la lluvia y

Aparece la luna en el claro cielo.

La primavera ha llegado a los pinares de Mijo

La niebla matinal se funde er el murmullo de las olas.

En las planicies del cielo la luna se detiene.

|0h, visión de encantamiento para humanos ojos ojos !

Vayamos todos ahora,

Crucemos los  atajos de la montaña,

Por la bahía de Kiyomi

Para ver a lo lejos los pinares de Mijo.

Pescadores, por qué retiráis vuestros barcos hacia la playa?

No es acaso hoy día de pesca?

Teméis aquellas nubes lejanas  que los vientos traen sobre la mar?

¡ Esperad !, es la primavera y en los verdes pinos

El viento canta su canción sin fin.

En la silencioso bahía

Los pequeños barcos de millares de pescadores

Blandamente se mecen al amanecer.

                                          (Salen el Segundo y Tercer pescadores)

Hakuryo:

Teme al fin llegado al pinar de Mijo

Cuya bella playa deslumbra mis ojos.

Cae  del cielo una lluvia de flores,

El aire se impregna de aromas

Que arrastran música divina.

No es este un acontecer de cada dia !

Y aquel herboso manto que pende de la rama de un pino?.Lo veré de cerca.

¡Que bellísimo color ! Y que fragancia!.

Lo llevaré a mi casa y lo mostraré a la gente de la aldea

Será un tesoro que nuestra familia habrá de guardar por generaciones.

(Entra el Angel )

Angel:

Detente,pescador!.Ese manto es mio.Adonde lo llevas?.

Hakuryo:

Lo he hallado aquí y quiero llevarlo para mi casa.

Angel:

Es el manto de plumas de un ángel

Que ningún mortal puede vestir.

Déjalo en la rama en donde lo has encontrado.

Hakuryo:

Qué ? El dueño de este manto eres tú? Un Angel del Cielo?

Razón de más para ponerlo a buen recaudo.

Será un tesoro en la tierra,

No te será devuelto.

Angel:

Triste de mí. Sin mi vestido de  plumas

Nunca más podré volar los caminos del aíre.

Jamás podré volver a mi celestial morada,

¡ Ten piedad !, ¡ Dame mí manto de plumasl.

Hakuryo:

Cuanto más oigo tus lamentos

Menos pienso en restiituirte el manto.

Angel:

Come el ave a quien cortar«« sus ala3

Ya no podré ascender a las asules planicies del cielo.

Hakuryo:

Angel,quedarás entre nosotros,en esta tierra sombría de los hombres

Angel:

¡Ay de mí!. Cuan amargo es el dolor de la tristeza.

¡Qué podré hacer?,

Hakuryo:

Hakuryo nunca más te restituirá las alas.

Angel:

Las fuerzas comienzan a abandonarme.

Angel y HaKuryo:

Quien podrá auxiliarlo?.

Coro:

Pobre Angel!. De su corona,

Donde el rocío las lágrimas como joyas relumbra, las flores

Que bellamente adornan sus trenzas

Se marchiten.Cinco veces el dolor

Corrompe su forna celestial.

Angel:

Tiendo  mi viste hacia las lejanas planicies del cielo,

Se elevan las brumas; en las nubes mi camino se confunde

Perdido mi destino.

Coro:           

Oh nubes que por el amplio cielo

A vuestro antojo divagáis,

Con cuanta envidia os contemplo!.

En vano suspiro al oir desvanecido

El canto de la Klavinka del Paraíso

Otrora a mis oidos dulcemente habitual.

A lo lejos se pierda el graznido de los patos salvajes

Emigrcndo hacia tierras de brumas.

Gaviotas y golondrinas marinas brincan en la espumosa cresta de las olas.

Y el viente corre a cielo abierto.

Sólo a mí el vuelo me ha abandonado.

Hakuryo:

Tanto es el dolor en tu contristada faz

Que de nuevo tendrás tu manto de plumas.

Angel:

Oh! que alegría! Que inmensa felicidad!.

Dámela pues.

Hakuryo :

Espera: Mucho he oído hablar de las danzas y de la música de los ángeles.

Sólo te devuelvo el manto

Si para mí danzas ahora.

Angel:

Felicidad bendita!.Recuperaré mis alas

Y volveré a ser líbre a  través del cielo.

Que inmenso es mi contento!.

Dejaré para memoria de los mortales hombres

Una danza divina.Bailaré la dansa

Que hace girar en ronda los castillos de la luna.

Revelaré a los tristes hombres secretas maravillas celestiales.

Más la danza es imponible sin mi manto

Dámelo pues.

Hakuryo:

No. De ningún modo! , Si te devuelvo el manto

Volarás al cielo sin danzar per a mí.

Angel:

La duda pertenece a los hombres,

En los seres divinos la falsedad no existe.

Hakuryo:

Avergonzado me siento Angel celestial.

Toma tu manto.

( El  Angel recibe su manto con las dos manos)

Angel :

El ángel celestial se cubre con el manto deplumas

Y baila la danza dol Arco Iris

Con su traje de alas.

Hakuryo :

Alas celestiales que mece el viento.

Angel:

Las amplias mangas flores son rociadas por la lluvia.

Háakuryo:

La música cantando…

Angel:

Y danzando...

(EI Angel comienza su danza)

Coro :

Ahora mortales oid el origen

De los azules reinos del Aire: el Firmameto.

El mundo debe su principio al gran dios Izanagui

Y a la gran diosa Izanami, que crearon

La Tierra para morada de los hombres,

Y sobre ella pusieron

Ilimitado, inmutable y eterno, el Firmamento.

Angel :

En la más alta cima fué erguido el palacio de la Luna

De muros tallados con cincel de jade.

Coro:

El palacio de la Luna donde treinta monarcas reinan,

Quince hasta la luna llena,vestidos «e blanco;

De la decimo-sexta luna en edelante, uno de ellos

En cada noche desaparece en los espacios,

Y otros quince reyes , vestidos de negro, les van sucediendo

Les van sucediendo.

Y mientras las celestes Hadas hacen girar a la Luna,

Para ellos cantan divina música.

Angel:

Yo soy us Hada de la luna.

Coro:•

De tu celestial morada has descendido

Un breve instante a convivir oon los hombres

Y a revelar la divina danza.

La bruma de la primavera envuelve a la Tierra

Y el Katsura florece en lu Luna.

En la angelical corona las flores rutilan de gloria,

Cantando la Primavera celestial.

Angel:

Para siempre sea loada esta hora.

Coro:

También en la Tierra la belleza florece.

Bramad vientos celestiales! Muros de nubes

Cierran el camino

Para que podanos retener esta forma virginal. No es hermosa

La floresta rezumando aromas primaverales,

El  lunar en el paisaje de Kiyonl

Y la nieve sobre la cima del monte Tuji

Despertando al amanecer?.

Más  hermosa todavía la playa de Nijo

Cuando la naciente luz de la primavera rotoza entre los pinos.

Decid: por qué el Cielo

Se apartó de los hombree de la Tierra?.

No son nuestros reyes hijos de los dioses

en estas Islas donde nace el Sol?.

Angel:

Raras veces los Angeles del Cielo

Descienden al reino de nuestro Soberano.

Coro:

Reino que habrá de perdurar come inmensa roca

Que apenas desgastará

El roce sutil de las alas de un ángel.

¡Oh maravillosa música !

EI Angel canta, y en su canto se funden

Las arpas y los árganos del cielo

Para vibrar en los aíres teñidos de púrpura

Del ocaso dal sol sobre el monte Sumeru

Y en las ondas azules que llegan a las verdes playas

De los pinares. De las islas que en el nar fluctúan.

Una nevada de florescencias nos llega.

( El Angel termina la danza, junta las manos y reza).

Angel:

El vestido verde-azul ora es del color del cielo,…

Coro:

Ora semeja las blancas brumas de la Primavera.

Angel:

El fino manto de rara belleza y exquisito perfume

Coro:

Gira a la izquierda, gira n la derecha,

Gira a la izquierda, gira a la derecha.

E cabello ce flores coronado,

Las amplias mangas se agitan

En los revuelos de la danza del Naciente.

Muchas danzas bailó

La bella Dama de la Luna,

Danzas del Naciente jamás vistas.

En la décimo-quinta noche

Alcanzó el símbolo de la Perfección

Irradiando en su luz

El esplendor de la Sabiduría.

Cumplidos estila Iba votos, el país en calma

Rico en los siete tesoros

Que por favor de la danza sagrada

Cayeron sobre la tierra;

El tiempo ha pasado

Y el manto de plumas se eleva

Ya sobre loe pinares de Mijo,

Ya sobre las nubes ele las islas fluctuantes.

Remontando el Monte Ashitaka,

Sobre la esfumada cumbre del  Monte Fuji

Se torna indistinto.

Y envuelto en las brumas

De los augustos espacios del cielo

De nuestra vista se pierde.

FIN